Receta de Albóndigas: un plato clásico y reconfortante que ha sido parte de la cocina tradicional en muchas culturas alrededor del mundo. Las albóndigas son pequeñas bolas de carne picada sazonada y mezclada con diversos ingredientes, que luego se cocinan en una deliciosa salsa. Esta receta es perfecta para aquellos que buscan una comida casera y reconfortante, llena de sabores intensos y texturas jugosas. Las albóndigas son versátiles y se pueden servir como plato principal acompañadas de arroz, pasta o puré de papas, o incluso como aperitivo en una fiesta o reunión. Además, son una excelente opción para aprovechar las sobras de carne picada que puedas tener en el refrigerador. En esta receta, te enseñaremos a preparar unas albóndigas jugosas y llenas de sabor, con una salsa de tomate casera que las hará aún más irresistibles. Sigue paso a paso nuestras instrucciones y sorprende a tu familia y amigos con estas deliciosas albóndigas caseras. ¡No te arrepentirás!
Receta de albóndigas: carne molida, pan rallado, huevo, cebolla, ajo, perejil, sal, pimienta, caldo de carne, harina, aceite.
Paso 1: Picar finamente la cebolla, el ajo y el perejil.
Paso 2: En un tazón grande, mezclar la carne molida, el pan rallado, el huevo, la cebolla, el ajo, el perejil, la sal y la pimienta.
Paso 3: Formar pequeñas albóndigas con la mezcla y reservar.
Paso 4: En una sartén grande, calentar un poco de aceite y dorar las albóndigas por todos lados.
Paso 5: Retirar las albóndigas de la sartén y reservar.
Paso 6: En la misma sartén, agregar un poco más de aceite si es necesario y agregar la harina, cocinar por unos minutos hasta que tome color.
Paso 7: Agregar el caldo de carne a la sartén y mezclar bien para formar una salsa.
Paso 8: Colocar las albóndigas nuevamente en la sartén con la salsa y cocinar a fuego lento por unos 15-20 minutos, hasta que las albóndigas estén cocidas por completo.
Paso 9: Servir las albóndigas con la salsa caliente y disfrutar.
Las albóndigas se pueden acompañar con una variedad de bebidas o tragos, dependiendo de las preferencias personales. Algunas opciones populares incluyen:
– Vino tinto: Un vino tinto seco y robusto, como un Cabernet Sauvignon o un Malbec, complementa muy bien el sabor de las albóndigas.
– Cerveza: Una cerveza lager o una cerveza artesanal con cuerpo y sabor equilibrado puede ser una excelente elección para acompañar las albóndigas.
– Refresco de cola: Si prefieres una opción sin alcohol, un refresco de cola puede ser una buena elección para equilibrar el sabor salado de las albóndigas.
– Agua con limón: Si buscas una opción refrescante y ligera, el agua con limón puede ser una buena elección para acompañar las albóndigas.
– Sidra: Una sidra seca o semiseca puede ser una opción interesante para acompañar las albóndigas, ya que su sabor afrutado puede complementar muy bien el sabor de la carne.
Estas son solo algunas sugerencias, pero al final la elección de la bebida o trago dependerá de tus preferencias personales y del contexto en el que se sirvan las albóndigas.