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Receta de Gambas al Ajillo

Las gambas al ajillo son un plato típico de la gastronomía española que se ha popularizado en todo el mundo. Esta receta es muy fácil de preparar y requiere pocos ingredientes, pero el resultado es espectacular. Las gambas se cocinan en una salsa de aceite de oliva, ajo y guindilla, lo que les da un sabor intenso y picante que las hace irresistibles.

Para preparar esta receta de gambas al ajillo, necesitarás gambas frescas, aceite de oliva, ajos, guindilla y sal. Lo primero que debes hacer es pelar y picar los ajos y la guindilla en trozos pequeños. A continuación, calienta el aceite de oliva en una sartén y añade los ajos y la guindilla. Cuando empiecen a dorarse, añade las gambas y saltea todo junto durante unos minutos hasta que las gambas estén cocidas.

Esta receta es perfecta para servir como aperitivo o como plato principal acompañado de arroz blanco o una ensalada fresca. ¡Anímate a preparar estas deliciosas gambas al ajillo y sorprende a tus invitados con un plato lleno de sabor y tradición española!

Receta de gambas al ajillo: gambas, aceite de oliva, ajos, guindilla, sal.

Paso 1: Reúne todos los ingredientes necesarios para la receta de gambas al ajillo: gambas, aceite de oliva, ajos, guindilla y sal.

Paso 2: Lava las gambas bajo agua fría para eliminar cualquier residuo de suciedad. Luego, sécalas con papel de cocina.

Paso 3: En una sartén grande, calienta un chorrito de aceite de oliva a fuego medio-alto.

Paso 4: Añade los ajos pelados y cortados en láminas finas a la sartén. Sofríe los ajos hasta que estén dorados y fragantes, teniendo cuidado de no quemarlos.

Paso 5: Agrega la guindilla entera o cortada en trozos pequeños a la sartén. Si prefieres un plato menos picante, puedes quitar las semillas de la guindilla antes de añadirla.

Paso 6: Añade las gambas a la sartén y cocínalas durante unos minutos, removiéndolas constantemente para que se cocinen de manera uniforme.

Paso 7: Cuando las gambas estén rosadas y completamente cocidas, sazónalas con sal al gusto. Recuerda que las gambas ya tienen un sabor naturalmente salado, así que ten cuidado de no excederte con la sal.

Paso 8: Retira la sartén del fuego y sirve las gambas al ajillo calientes. Puedes acompañarlas con pan para mojar en la deliciosa salsa de aceite de oliva, ajo y guindilla.

Paso 9: ¡Disfruta de tus gambas al ajillo caseras! Puedes servirlas como aperitivo, plato principal o como parte de una comida más grande.

La receta de gamba al ajillo se puede acompañar con una variedad de bebidas o tragos. Algunas opciones populares incluyen:

– Vino blanco: Un vino blanco seco y ligero como un Albariño, Rueda o Verdejo complementará muy bien los sabores de la gamba al ajillo.
– Cerveza: Una cerveza fría y refrescante, como una cerveza rubia o una cerveza de trigo, puede ser una excelente opción para acompañar este plato.
– Vermut: Un vermut blanco o rojo, servido con hielo y una rodaja de naranja o limón, puede ser una elección interesante para maridar con la gamba al ajillo.
– Mojito: Un mojito clásico, hecho con ron blanco, menta fresca, lima, azúcar y soda, puede ser una opción refrescante y deliciosa para acompañar este plato.
– Agua con gas: Si prefieres una opción sin alcohol, un agua con gas bien fría puede ser una elección simple pero efectiva para acompañar la gamba al ajillo.

Recuerda que la elección de la bebida o trago dependerá de tus preferencias personales y del contexto en el que se sirva la comida. ¡Disfruta de tu gamba al ajillo con la bebida que más te guste!